Somos una Comunidad de aprendizaje y práctica que busca compartir el Buddhismo desde un contexto hispanohablante.
Entendemos y promovemos el Buddhismo como una ciencia de la mente, desde el cual las personas tienen acceso a un cúmulo de aprendizajes, metodologías y caja de herramientas que le permitirán transformar su vida cotidiana de una manera asertiva.
Desarrollamos procesos de estudio y práctica del Buddhismo. Realizamos acompañamiento emocional de individuos y grupos con el fin de fortalecer relaciones asertivas.
Buscamos promover actividades de paz, no-violencia, educación alternativa y paradigma emergentes que nos conduzcan a generar seres humanos con una nueva consciencia en el siglo XXI.
El Buddhismo se originó en el siglo VI a.C. con las enseñanzas de Sidarta Gotama, quien más tarde sería conocido como el Buda Shakyamuni, el sabio de la familia Shakya. Sidarta nació en Lumbini, en el actual Nepal, en el seno de una familia noble. Desde joven, experimentó el sufrimiento humano al observar el envejecimiento, la enfermedad y la muerte. Estos encuentros lo motivaron a abandonar su vida de lujo en busca de la verdad que aliviara el sufrimiento del ser humano.
Después de años de practicar con diferentes maestros, Siddharta, insatisfecho con las respuestas recibidas, se sentó en meditación bajo el árbol Bodhi en Bodh Gaya, India, decidido a no levantarse hasta alcanzar el Despertar. Tras una profunda meditación, logró la iluminación, comprendiendo las Cuatro Nobles Verdades y el Noble Óctuple Sendero, los cuales son los fundamentos del Buddhismo. Estas enseñanzas proporcionaron el marco para la liberación del ciclo de nacimiento y muerte, conocido como samsara.
El Buddha Shakyamuni dedicó el resto de su vida a enseñar este camino de liberación a una amplia variedad de personas, desde reyes hasta mendigos. A lo largo de los siglos, sus enseñanzas, conocidas como el Dharma, se expandieron desde la India a otras regiones de Asia, como China, Japón, Corea vietnam, dando lugar a diversas escuelas y tradiciones Buddhistas, entre ellas el Budismo Chan y la Escuela de la Tierra Pura.
El Buddhismo Chan se desarrolló en China a partir de las enseñanzas del Budismo Dhyāna indio, una forma de meditación que enfatiza la absorción mental y la concentración. En el siglo VI, el monje indio Bodhidharma (Da Mo), considerado el 28.º Patriarca del Budismo indio, introdujo estas enseñanzas en China, fundando lo que más tarde se conocería como la Escuela Chan.
El Chan se caracteriza por su enfoque directo hacia la meditación y la experiencia personal del Despertar, por encima de los textos y las doctrinas. La práctica central del Chan es la meditación sentada, que ayuda a los practicantes a alcanzar la claridad mental y la iluminación. El linaje del Buddhismo Chan fue transmitido a través de una serie de maestros/as que mantuvieron la enseñanza viva en China:
El sexto patriarca Huineng fue especialmente influyente en la consolidación de la Escuela Chan, que luego se extendió a otros países como Japón, donde tomó el nombre de Zen, Corea, donde se conoce como Son, y Vietnam, donde se llama Thien. La tradición Chan, basada en la confianza, comprensión, práctica y realización, sigue siendo una de las formas más influyentes del Buddhismo en el mundo.
El Budismo de la Tierra Pura es una escuela del Budismo Mahāyāna que surgió en China en el siglo IV d.C. Esta tradición se centra en la práctica del Buda Amitābha, destacando la aspiración de alcanzar un estado mental de pureza y claridad, conocido como la Tierra Pura. Este estado representa un entorno interior donde las condiciones son propicias para el crecimiento espiritual y la iluminación.
A lo largo de los siglos, el Budismo de la Tierra Pura se popularizó por su enfoque accesible, permitiendo a personas comunes, que quizás no podían dedicarse a disciplinas meditativas avanzadas, cultivar la paz mental a través de la práctica y la recitación del nombre de Amitābha. Esta práctica no solo se ve como un acto de confianza, sino como un medio para transformar la mente y conectar con una experiencia de compasión y sabiduría.
El linaje del Budismo de la Tierra Pura en China ha sido transmitido por una serie de maestros/as que han mantenido viva esta enseñanza. Entre los más destacados están:
La Escuela de la Tierra Pura se expandió rápidamente en China y luego en Japón, Corea y Vietnam, adaptándose a los contextos culturales de cada región. En cada uno de estos lugares, la práctica del Buddha Amitābha se consolidó como una de las principales formas de profundización interior, ofreciendo a los practicantes un enfoque tangible para cultivar la paz mental y la sabiduría en sus vidas diaria
La Comunidad Camino del Dharma, bajo la guía del Venerable Maestro Zheng Gong, ha jugado un papel importante en la difusión del Buddhismo en Colombia y América Latina desde su fundación. La comunidad remonta sus raíces a las enseñanzas del Buddha Shakyamuni y en las tradiciones Chan y Tierra Pura, adaptando estas enseñanzas milenarias al contexto hispanohablante.
En 2017, comenzaron a realizarse las primeras conferencias sobre Buddhismo en Bogotá, lo que marcó el inicio de la comunidad como un espacio de estudio y práctica interior. Durante este año, el Venerable Maestro Zheng Gong ofreció enseñanzas sobre la meditación y los principios básicos del Dharma, atrayendo a personas interesadas en profundizar en la filosofía y práctica budista.
En 2018, la comunidad organizó los primeros retiros de meditación, que brindaron a los practicantes la oportunidad de sumergirse en las diferentes prácticas contemplativas. Estos retiros marcaron un punto clave en la consolidación de la comunidad, ya que permitieron a los participantes conectar profundamente con las enseñanzas del Buddhismo.
Para 2019, la comunidad obtuvo la Personería Jurídica Especial por parte del Ministerio del Interior de Colombia, formalizando su estatus como una organización reconocida en el país. Ese mismo año, se establecieron espacios permanentes de práctica en varias ciudades de Colombia, como Bogotá, Barranquilla y Cali, ofreciendo un entorno estructurado para el estudio del Buddhismo y la práctica de la meditación.
En 2020, la Comunidad Camino del Dharma se adaptó rápidamente a la nueva realidad impuesta por la pandemia de COVID-19, trasladando sus actividades a plataformas virtuales. Las clases de meditación, conferencias y retiros continuaron en línea, lo que permitió que la comunidad expandiera su alcance a otros países de habla hispana.
Para 2021, la comunidad había consolidado su presencia tanto en el ámbito virtual como en el presencial, con un grupo comprometido de practicantes. A través de programas continuos de estudio y práctica, la comunidad ofreció un entrenamiento integral en psicología Buddhista y otras herramientas para el desarrollo espiritual.
Actualmente, la Comunidad Camino del Dharma continúa consolidando sus vínculos con diferentes organizaciones en toda América Latina y el mundo, lo que ha permitido una mayor colaboración y participación en eventos internacionales. A medida que la comunidad crece, se han expandido las actividades a nuevas ciudades, ofreciendo programas adaptados a las necesidades de los practicantes modernos, sin perder la esencia de la tradición Buddhista. Este proceso de expansión incluye la creación de nuevos espacios de práctica, retiros más accesibles y un enfoque en la formación integral de los participantes, tanto presencial como virtualmente, lo que fortalece su presencia y legado en la región.
